En una comparecencia en la Cámara gallega para contestar en bloque las preguntas formuladas por la oposición, Feijóo admitió que “hace dos décadas me equivoqué, sin matices” y por eso hoy “doy todas las explicaciones con transparencia, sinceridad y humildad”.

“Son fotos con una persona que en aquel momento no estaba condenada por nada”, destacó Feijóo, que reconoció que “años más tarde esta persona sí sería condenada por algo peor, por narcotráfico”, a propósito de lo cual dijo que “vaya por delante mi repulsa”.

Agregó que en el momento de tomarse las polémicas imágenes, “yo no era ni presidente ni esa persona narcotraficante”, si bien admitió que “son fotos que aunque sea antiguas llaman la atención” y “soy consciente del morbo que despiertan”. “En lo que sí creo que tienen razón”, sentenció, “es que dos décadas atrás no tuve prudencia y por eso quise dar ahora las explicaciones precisas y con sinceridad”.

Explicó que tuvo conocimiento de la existencia de las fotos en 2003, como resultado de una operación policial y que desde ese momento se le comunicó en diversas ocasiones que podrían ser publicadas, sobre todo antes de las últimas elecciones.

Sobre qué tipo de relación tuvo con Marcial Dorado, aseveró que “se limitaba a momentos de ocio, sin más trascendencia” porque, añadió, “si fuera mi amigo no tendría problemas en decirlo”. Confesó que ese contexto viajó con Dorado a Picos de Europa, Tenerife, Baleares y Portugal, pero que no así a Reino Unido o Suiza, como se ha publicado.

También que los gastos de los viajes se sufragaron conforme a lo habitual en viajes en grupo, y que en 1999 finalizó esta relación al conocer que Dorado tenía causas abiertas por contrabando de tabaco: “Nunca en las fechas posteriores hubo relación alguna”.

“Si me llamó para felicitarme el cumpleaños o por Navidad, no lo puedo precisar”, dijo, y sobre qué conocía sobre Dorado cuando se estableció la relación, “•en un primer momento, nada, después sí sé” que estaba relacionado con el contrabando de tabaco pero “ que siempre salió exculpado”.

De su futuro como narcotraficante, “no tengo poderes adivinatorios”, espetó el presidente gallego, quien señaló que “no podía saber si iba a ser un narco. Sí debería haber dado más importancia a estos antecedentes”, admitió, al tiempo que indicó no sentirse preocupado por si hay nuevas fotografías.