"La Infanta Cristina no debe renunciar a sus derechos dinásticos porque sería reconocer un comportamiento indebido"
-Sostiene el historiador José Luis Sampedro Escolar
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José Luis Sampedro Escolar, historiador de la Academia Matritense de Heráldica y Genealogía, especialista en la Casa Real, afirmó este sábado que, en su opinión, "la Infanta Cristina no debe renunciar a sus derechos dinásticos por estar imputada, porque sería reconocer un comportamiento indebido" y además agregó porque es "bastante improbable que pudiera ocupar algún día el trono de España, ya que es la séptima en la línea de sucesión".
Sampedro Escolar, explicó a Servimedia que "en el año 1935 la Infanta Beatriz, hermana de Don Juan, padre del Rey renunció ante notario a sus derechos dinásticos".
"También lo hizo el hijo mayor de Alfonso XIII, don Alfonso, que en el exilio y para poder casarse con Edelmira Sampedro, renunció a su condición de herdero y dejó de ser príncipe de Asturias para convertirse en conde de Covadonga. Después también renunció a sus derechos dinásticos, don Jaime, el hermano sordo de don Juan, conde de Barcelona".
El caso de don Juan, padre del Rey es diferente. "Don Juan no renunció a sus derechos en 1977, sino que hizo una cesión de los mismos a quien ya era Rey de España, su hijo, Juan Carlos I", concreta el historiador.
La historia reciente de España cuenta con varias abdicaciones. "Carlos I renunció tanto a la corona de España, como a la del sacro romano imperio. El siguiente monarca que renunció a seguir reinando, fue Felipe V, en 1724, el primer Borbón, que abdicó a favor de su hijo Luis I porque pensaba que iba a suceder a Luis XV de Francia, enfermo de viruela, pero el que se murió de esa enfermedad fue su hijo y tuvo que volver a asumir el trono de España".
"El siguiente en renunciar fue Carlos IV, una renuncia que es inválida porque se le obligó por la fuerza, tras el motín de Aranjuez para que abdicara en Fernando VII en 1808. La corona retornó a Carlos IV y éste se la dio Napoleón, en Bayona, también por la fuerza, y Napoleón se la da a su hermano José I. Con lo que se producen un cúmulo de situaciones inválidas respecto al derecho y, por lo tanto, la legitimidad histórica queda en las Cortes de Cáidz que restauran a Fernando VII, cuando acaba la Guerra de la Independencia", relata Sampedro.
"Isabel II abdicó en 1870 en su hijo Alfonso XII, que es proclamado rey de España mediante un golpe de estado del ejercito en 1874, en Sagunto (Valencia). Muere Alfonso XII y su mujer, María Cristina asume la regencia ya que el futuro Alfonso XIII, todavía no había nacido. Alfonso XIII suspende el ejercicio de sus funciones el 14 de abril de 1931 y en 1941, a punto de morir, abdica en su hijo don Juan como rey de España, que nunca llegó a reinar", concluyó el historiador.
(SERVIMEDIA)
06 Abr 2013
MAN