Con esta operación, denominada "Ipanema", han sido esclarecidos un total de 15 robos perpetrados en las localidades de Madrid, Valdemoro, Las Rozas, Alcalá de Henares y Leganés. No obstante, según informó hoy la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid, la investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones.

La banda se valía de la información que obtenían varios de sus componentes a través de sus actividades laborales, como una empleada de hogar y un transportista. El cabecilla de la organización tenía un locutorio donde recepcionaba la mercancía robada, que después era vendida o incluso regalada.

La investigación comenzó el pasado mes de junio tras un robo en una vivienda de Las Matas (Las Rozas), donde los asaltantes emplearon una violencia extrema contra los septuagenarios moradores del domicilio, que tuvieron que ser atendidos en un centro hospitalario.

Las primeras pesquisas policiales se centraron en el entorno de los asaltados y en analizar si se habían producido robos similares en la zona. Poco después, se inició una investigación sobre una empleada doméstica de nacionalidad rumana, ante las sospechas de que pudiera haber facilitado información sobre los moradores del inmueble.

La investigación permitió descubrir toda una red delictiva liderada por un ciudadano rumano, que era el encargado de organizar los golpes delictivos y que regentaba un locutorio en la zona de Vallecas (Madrid) donde recepcionaba el género sustraído.

Según la Guardia Civil, todos los robos venían precedidos por un reconocimiento previo de la zona. Para ello, se valían de la empleada de hogar, que les facilitaba información de la posible existencia de caja fuerte y de si en la vivienda había elevadas cantidades de dinero en efectivo; y del subjefe de la banda, que trabajaba como transportista y realizaba portes para una empresa de muebles y electrodomésticos.

Una vez seleccionado el objetivo, fijaban el día del robo, que perpetraban preferiblemente en horario diurno, sin importarles si estaban los propietarios en su interior, que eran reducidos incluso utilizando la violencia.

La operación culminó la pasada semana con la detención de nueve personas (siete hombres y dos mujeres) y la realización de los oportunos registros domiciliarios, donde han sido recuperadas gran cantidad de efectos, entre ellos joyas, muchas de las cuales ya han sido reconocidas por sus legítimos propietarios.

Todos los detenidos varones, que supuestamente eran los autores materiales de los asaltos, ya han ingresado en prisión, así como la empleada doméstica que proporcionó la información necesaria para el violento asalto que motivó el inicio de esta investigación.