En una entrevista en TVE recogida por Servimedia, Jáuregui alertó de que a España le falta “liderazgo, vertebración de país para el momento que estamos viviendo”, y cree que no es tanto el llamado “síndrome de Moncloa” sino más bien una mera “carencia de liderazgo, de política, de hoja de ruta, de orientación”.

Reconoció que siente cierta solidaridad hacia el Gobierno porque “se sufre mucho” gestionando tantas dificultades, pero denunció que no se está haciendo “lo que me parece más necesario: llamar al país al esfuerzo colectivo”.

Cree que España tiene una crisis no solo económica y social sino política, democrática, territorial, y no la puede superar en soledad un Gobierno que, pese a su mayoría absoluta, tiene un liderazgo social “muy débil”. “España está como para las grandes ocasiones”, apuntó.

A pesar de sus derrotas electorales, Jáuregui subrayó que los españoles siguen vinculando al PSOE con la gobernación del país, “con los grandes momentos”, y su reto ahora es “volver a ser el partido al que la gente mire con esperanza” como lo hacía años atrás.

Jáuregui se mostró comprensivo con el enfado de los ciudadanos, aunque se mostró partidario de “canalizar esa indignación positivamente” y se declaró convencido de que la gente no rechaza la política en general, sino la política “ineficaz e injusta”, y quiere políticos honrados y partidos honestos.

Cree que tiene “fundamento” el reproche que muchos ciudadanos hacen a los partidos políticos, y que es necesaria para todos ellos “una sacudida de transparencia” y de cercanía.

Para ello, abogó por un “paquete de respuesta institucional pactada” entre los partidos, “diez o doce grandes reformas legislativas para asegurar que cosas que han pasado no vuelvan a suceder” y reaccionar entre todos para preservar la estructura del sistema democrático.