En un comunicado, la AEAC se refirió al reciente estudio de la Agencia del Medicamento francesa que recomienda “una vigilancia más estrecha de los anticonceptivos orales y de la PDD como perteneciente al mismo grupo farmacológico", tras detectar “graves efectos secundarios en varias pacientes”.

Por ello, exigió que vuelva a ser necesaria la receta médica para adquirir este medicamento, y amenazó con denunciar a Ana Mato por “delitos contra la salud pública” si no actúa en este sentido.

“Las exministras Trinidad Jiménez y Bibiana Aído liberalizaron la comercialización de este medicamento por razones ideológicas y no médicas”, apuntó AEAC, que afirmó que algunas marcas de PDD en España contienen dosis 50 veces superiores a las de anticonceptivos orales.

Según AEAC, en consecuencia es “urgente” reinstaurar los controles por prescripción facultativa, que permitan valorar el riesgo trombótico asociado a la toma de este tipo de medicamentos.