El director general se refirió a este asunto en la localidad portuguesa de Évora, donde participó en la sesión de clausura de un encuentro entre responsables policiales de extranjería de España y Portugal.

Según informó la Policía Nacional, su director general se refirió a que este descenso de llegada de ilegales a las costas españolas es fruto de la colaboración con Marruecos, Argelia, Mauritania y otros países del continente africano. “Ningún país puede entender el fenómeno de la inmigración ilegal como un fenómeno aislado”, aseguró Cosidó.

El director general hizo estas consideraciones en presencia de los máximos responsables de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional y el Serviço de Extrangeiros e Fronteiras (SEF) de Portugal.

En este sentido, estos dos departamentos policiales mostraron su compromiso en desplazar agentes a aquellas fronteras europeas en las que es necesaria una especial presencia y control migratorio.

Al mismo tiempo, la Policía española y la portuguesa acordaron intensificar su colaboración en lo que se refiere a la lucha contra la trata de personas para su explotación sexual y laboral. A este respecto, Cosidó destacó que el objetivo es aunar esfuerzos para luchar contra las redes que trafican con personas, “un comercio inhumano que somete a hombres u mujeres a la explotación sexual y laboral y atenta contra el bien más preciado: la dignidad humana”.