Descubren un nuevo método de síntesis de nanopartículas para aplicaciones biomédicas

MADRID
SERVIMEDIA

Un trabajo de la Universidad de Leicester, en el que participan investigadores del departamento de Física Aplicada de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), muestra un método que intenta salvar la dificultad de obtener nanopartículas en forma de hidrosoles, un inconveniente actual para un mayor aprovechamiento de éstas en tratamientos bíomédicos.

Según informa la universidad madrileña, las nanopartículas con tamaños entre 2 y 100 nanometros (nm) son entidades importantes en biomedicina, con un amplio rango de aplicaciones. Pueden ser utilizadas, por ejemplo, como agentes de contraste en resonancia magnética, al igual que en el transporte de fármacos y en tratamientos de tumores por hipertermia.

El trabajo de la Universidad de Leicester, publicado en 'Journal of Nanoparticle Research', hace un aporte. Según señalan sus autores, los primeros resultados son prometedores con vistas a las aplicaciones biomédicas en tratamientos tumorales por hipertermia magnética.

La capacidad del nuevo método para obtener nanopartículas en forma de hidrosoles ha sido demostrada produciendo suspensiones de nanopartículas elementales de plata, oro y cobre, así como nanopartículas con estructura "núcleo-corteza" con núcleos de hierro y cortezas de oro y óxido de hierro.

En términos generales, el método consiste en introducir -con una velocidad controlada- vapor de agua como un haz molecular en la cámara donde se depositan las nanopartículas. De acuerdo con el trabajo, el haz incide sobre un sustrato enfriado con nitrógeno líquido a 77 grados Kelvin (K).

Las nanopartículas se depositan simultáneamente en la misma superficie, quedando embebidas en una matriz de hielo que posteriormente se funde. Las nanopartículas se producen en una fuente de agregación en fase gaseosa con una distribución estrecha de tamaños, y eventualmente se recubren con capas delgadas de otros metales.

El entorno limpio de ultra-alto vacío se preserva en la región de la fuente donde se forman las nanopartículas debido a la baja presión de vapor del hielo a 77K y a un sistema de bombeo diferencial.

Simulaciones de dinámica molecular realizadas por los autores del trabajo muestran que las nanopartículas no sufren distorsiones importantes cuando quedan embebidas en la matriz de hielo. Sin embargo, las nanopartículas comienzan a aglomerarse en cuanto el hielo se funde.

El estudio también muestra cómo prevenir esta aglomeración añadiendo surfactantes.

(SERVIMEDIA)
11 Mar 2013
JCV/gja