El presidente de esta asociación, Guillermo Cánovas, explicó a Servimedia, que el estudio pretende conocer la relación de los niños con Internet, y conocer si realmente es un servicio beneficioso para el menor o por el contrario se puede volver contra ellos.

En este sentido, Cánovas manifestó que, de ese 30%, el mayor porcentaje correponde al acoso sexual, "en una proporción de 9 a 1", quedando la captación por grupos sectários y neonazis en un segundo plano.

La forma de actuar de estos acosadores se produce en dos fases, la primera es una toma de contacto a través de los chat, en los que se hacen pasar por niños y entablan una primera conversación. La segunda fase consiste en proporcionar al menor una dirección de correo electrónico para seguir en contacto y es por este medio por el que finalmente reciben acoso sexual.

Cánovs denunció que la franja de edad que más propuestas sexuales recibe es la comprendida entre los 12 y 13 años. En cuanto al sexo del acosado, el presidente de ACPI, manifestó que las niñas reciben más propuestas que los varones, con una proporción de 75% frente al 25%, respectivamente.

DEFENSOR DEL MENOR

Por otra parte, el Defensor del Menor, Pedro Núñez Morgades, dijo a esta agencia que una de las propuestas para acabar con el problema sería la creación de una mesa, compuesta por miembros del Ministrio de Ciencia y Tecnología, Policía y Guardia Civil, expertos en nuevas tecnologías, así como las asociaciones especializadas en el sector, que vele por los intereses de los menores.

Núñez Morgades lamentó que los menores estén expuestos a estos "terribles problemas" y exigió una regulación de los contenidos en Internet que proteja a los menores. "Esto no quiere decir que esté en contra de Internet, sino que hay que ser consciente de que también tiene su parte negativa", explicó el Defensor del Menor

Finalmente, resaltó que sería muy beneficioso para los menores que se regulase la entrada de los niños en los cibercafés, puesto que desde esos centros pueden acceder a cualquier contenido, quedando "completamente desprotegidos". Para contrarrestar este hecho propone crear zonas acotadas dentro de los cibercafés que aseguren la protección de los menores, frente a contenidos no deseados.