El estudio demuestra que la incidencia de este problema es cincuenta veces más común de lo que se creía hasta el momento y podría afectar, según los cálculos realizados por estos investigadores, a unas ochocientas mil a un millón de personas.

Las manías comienzan especialmente en la adolescencia. El 70 por ciento de los pacientes analizados padecían estos trastornos psíquicos antes de los5 años y se presenta después de los 40 años.

El doctor Calle asegura que el 90 por ciento de los casos resistentes tratados con antiobsesivos o antidepresivos por vía intravenosa en forma de goteros ofrecieron muy buenos resultados.

Entre estos casos resistentes, el psiquiatra valenciano recuerda el caso del chico adolescente que perdía más de seis horas lavándose o el hombre que cada vez que conducía estaba convencido de haber atropellado a alguien.

Las manías más usuales son las de tipo agesivo: miedo a hacer mal a otros o a uno mismo, sufrir imágenes violentas y horribles, miedo a hace algo indebido o algo criminal.

Otras obsesiones frecuentes son las de carácter sexual (en forma de imágenes o pensamientos, especialmente sobre incesto, bestialidad u homosexualidad), obsesión por la simetría, por chequear o revisar, por ordenar o por contar hasta un cierto número.