Así lo anunciaron en rueda de prensa los secretarios generales de CCOO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, en la que también participaron el responsable de USO, Julio Salazar, y la presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (Fademur), Teresa López, como representantes de la Cumbre Social.

En este sentido, Toxo aseguró que en 2013 la conflictividad social "seguirá creciendo", debido al "desastre" al que las políticas del Gobierno están "abocando a franjas cada vez más importantes de la población". Cabe recordar que en 2012 se celebraron por primera vez dos huelgas generales en un mismo año.

En una línea similar, Méndez insistió en que "si no se corrige en profundidad la orientación política, parece previsible que la repuesta de la ciudadanía, de los trabajadores y de las organizaciones sociales esté en simetría con el deterioro de la situación".

Para evitarlo, el líder de UGT instó al Gobierno a que "corrija la deriva caótica y catastrófica de sus políticas", que provocarán "más recesión, más paro y más desigualdades".

Asimismo, Toxo apuntó que el incremento de la conflictividad "no es inevitable", ya que el presidente del Gobierno tiene "desde diciembre propuestas más que suficientes para cambiar el rumbo de las políticas y evitar los efectos sociales y dramáticos en términos de desempleo que provocarán la forma en la que está encarando esta fase de la crisis".

Por esta razón, defendió que debería reconducir su política "a un terreno de diálogo, de negociación y de acuerdo para evitar la profundización del conflicto social y de los efectos demoledores que las políticas tienen sobre la sociedad".

MOVILIZACIONES

En este marco, la Cumbre Social, de la que forman parte CCOO y UGT, ha aprobado la convocatoria de movilizaciones para el próximo 10 de marzo, en el marco de la jornada de protesta prevista por la Confederación Europea de Sindicatos (CES) en el conjunto del continente.

Toxo apuntó que de momento hay manifestaciones convocadas en 50 ciudades españolas, a las que se suman otras tres en las que se producirán concentraciones en señal de protesta contra la política económica europea y española.

Esta jornada de movilizaciones a nivel europeo es "continuación" de la huelga general "ibérica" celebrada el pasado 14 de noviembre en España y Portugal, y que en el resto del continente tuvo distintas manifestaciones.

La Cumbre Social ha decidido adelantar al día 10 de marzo las movilizaciones en España, dentro de la jornada convocada por la CES para el día 13, para "facilitar una asistencia masiva de la ciudadanía". Asimismo, Toxo explicó que la convocatoria de la organización sindical europea se manifestará al día siguiente, el 14 de marzo, en Bélgica, coincidiendo con el inicio de la Cumbre del Consejo de la Unión Europea.

En este sentido, Toxo reiteró que las políticas económicas en Europa están siendo "suicidas", particularmente en lo que se refiere al empleo. Así, denunció que "contra todas las evidencias", la Unión Europea se "empecina en políticas que acentúan la dinámica de recesión y que tienen efectos políticos demoledores en términos democráticos", como en las últimas elecciones en Italia.

A esto se suma la situación en España, que está "trufada de casos de corrupción" y que provoca que el aire sea "irrespirable" en el país. Por esta razón, sostuvo que el país vive "el peor momento desde que comenzó la crisis".

Según Toxo, "cada vez se destruye mayor destrucción de empleo asalariado" que "no se compensa en absoluto" con la generación de otro tipo de empleos, que "parece que era el objetivo del Gobierno.

En este sentido, advirtió al Ejecutivo de que el emprendimiento no podrá "sustituir la destrucción acelerada del empleo asalariado".

A esta situación, que podría "empeorar" en 2013, se suma el "hartazgo" por la situación de la clase política, lo que lleve a que "es prioritario resolver la crisis política para poder encarar con algunas garantías de éxito la crisis económica".

Por esta razón, Toxo anunció que la Cumbre Social ha decidido "convertirse en el cauce por el que se exprese la ciudadanía española para hacer patente su descontento con las políticas que se están desarrollando".

"BELIGERANTE"

El líder de UGT reclamó una política "beligerante contra el paro, y no contra el empleo", que la que, en su opinión, desarrollan las instituciones nacionales y comunitarias, que "no están cumpliendo con su deber democrático y social".

Así, acusó a la Unión Europea de permitir que la crisis se esté extendiendo "como una mancha de aceite" por los países de la UE, y denunció que piensan que "pueden jugar a los dados, como si fueran dioses, con las expectativas y aspiraciones de los países del sur de Europa".

Méndez consideró "difícilmente comprensible" que las instituciones europeas permitan que no se computen como déficit las ayudas al sector bancario, y sí las inversiones tecnológicas, en servicios públicos fundamentales o en formación, entre otras.

Por su parte, el responsable de USO, Julio Salazar, defendió que las políticas impulsadas desde Europa y España están "sobradamente probadas como fracasadas". "La realidad ha mostrado que son medidas corrosivas para el empleo, los salarios, las prestaciones sociales, la dependencia y las pensiones", denunció el secretario general de esta organización, quien acusó a las instituciones de gobernar "de espalda a los ciudadanos".

Por otro lado, Teresa López denunció que la situación de crisis y las políticas aplicadas por el Gobierno están incrementando las desigualdades de las mujeres, y también del mundo rural y el resto, que ya está "sufriendo el desmantelamiento" del estado de bienestar.