En los pasillos del Congreso, después de que Iberia presentara el Ere y los sindicatos respondieran con la convocatoria de huelgas, la ministra insistió en reclamar acuerdos para que nos perjudicados no sean los ciudadanos.

Pidió "arrimar el hombro más que nunca" como corresponde en tiempos de crisis, y garantizó que por parte del Gobierno se actuará debidamente en un sector que está liberalizado.

Fomento entiende que la empresa debe aplicar las reformas que considere oportunas para "ser viable", pero con unos requisitos fundamentales.

El primero de ellos es garantizar la conectividad con América Latina, las islas y Ceuta y Melilla.

También garantizar el futuro del "hub" de Barajas, en el que los españoles "hemos invertido muchos miles de millones" de euros que en parte "aún hay que pagar".

Exigió, por tanto, que empresa y trabajadores se pongan de acuerdo para garantizar la viabilidad de Iberia sin poner el riesgo el sector aéreo español ni a una compañía "de bandera" para España.