Según FSG, los anuncios promocionales del programa que ya se han podido ver “hacen especial hincapié en aspectos morbosos y estereotipados” de la comunidad gitana.

En nota de prensa, FSG criticó que este tipo de contenidos “toman la parte por el todo y difunden en la sociedad mayoritaria una realidad parcial que estigmatiza al conjunto de los gitanos”.

Añade que la publicidad de esta serie pretende elevar los índices de audiencia, y así por ejemplo se dedica el primer episodio a “la boda gitana” y a una de sus prácticas más “morbosas para la población mayoritaria”, como la prueba del pañuelo, afirmó.