Los magistrados de la Sala de lo Civil, presididos por Francisco Marín Castán, han decidido sin embarco reducir de 3.489.000 a 30.000 euros la indemnización que Baena debe pagar al Barça al estimar el recurso del jugador contra la sentencia de la Audiencia Provincial de Barcelona.

El Alto Tribunal ha concluido que Baena extinguió ilegalmente y de forma anticipada el precontrato de trabajo que firmaron en abril de 2002, cuando él tenía trece años, el Fútbol Club Barcelona y sus padres. El Barça interpuso una demanda contra Baena en la que reclamaba la suma de 3.489.000 euros en concepto de la cláusula penal pactada en el precontrato, al haberse integrado el futbolista en la plantilla del Español, incumpliendo así los compromisos pactados en dicho precontrato.

En la sentencia hecha pública hoy, el Supremo declara la nulidad del contrato litigioso, aunque condena al jugador al pago de treinta mil euros al Fútbol Club Barcelona en concepto de indemnización por extinción anticipada.

La Sala de lo Civil considera que este tipo de contrataciones de menores debe ser objeto de especial protección por el ordenamiento jurídico y subraya la necesidad de que exista autorización judicial para este tipo de contratos, al implicar contenidos obligacionales económicos relevantes para el menor y su futuro.