En un comunicado, Exteriores deseó a Kerry un "feliz desempeño" al frente de la política exterior norteamericana, un puesto para el que valora "la larga experiencia política y el dilatado historial" de Kerry para afrontar "las complejas circunstancias de la actual comunidad internacional".

El Ministerio confía en mantener con el Departamento de Estado y su nuevo titular el "excelente espíritu" que presidió la relaciones con su predecesora, Hillary Clinton, "con el fin de reforzar y profundizar la cooperación" entre ambos países.