En una entrevista en Gestiona Radio recogida por Servimedia, Sevilla admitió que cuando una entidad tiene los problemas de solvencia que ha tenido Bankia es porque pudo haber decisiones “cuestionables”.

A este respecto, apuntó que la apuesta por el negocio promotor e inmobiliario, que supone ahora pérdidas cercanas al 50% al traspasar esos activos tóxicos al Sareb, fue muy superior a la de sus competidores.

Por otro lado, aseguró que tanto en lo referente a los despidos como en la solución para los tenedores de preferentes, las exigencias de Bruselas han sido más duras que las que hubieran querido llevar a cabo los actuales directivos de Bankia.

En cuanto a la reducción de plantilla, el número dos de la entidad nacionalizada afirmó que “estamos empeñados en reducir el efecto en términos de despidos de la eliminación de 6.000 puestos de trabajo exigidos por Bruselas”. De hecho, el banco plantea ya ahora 5.000 despidos.

Sevilla explicó que la reducción se produce tanto porque la entidad espera vender filiales traspasando a la plantilla como por su intención de externalizar algunos servicios, en los que se mantendrían los trabajadores.

Por ello, espera poder alcanzar un acuerdo con los sindicatos, a los que les pide un “ejercicio de responsabilidad porque entienden la situación de Bankia y el entorno donde nos movemos”.

Sobre el hecho de que los tenedores de preferentes van a perder un 40% de lo invertido, afirmó que “es de las cosas menos agradables del plan de reestructuración que tenemos delante”. “Hubiéramos querido una solución de una naturaleza diferente, pero el marco fijado por Bruselas es el que es”, añadió.