Dijo que estas familias, que carecen de recursos económicos, tendrán garantizada la prestación con el abono de los pagos de enero a junio.

“Debido a la grave situación económica que vivimos actualmente y con un incremento del número de beneficiarios previstos para el próximo año, el Gobierno regional abonará la RMI a las familias más vulnerables y desfavorecidas que realmente necesiten esta prestación en 2013”, añadió.

Destacó que Madrid es una de las pocas comunidades autónomas que garantizan la percepción de manera indefinida a las familias que acrediten los requisitos establecidos en la RMI.

Dijo que los créditos destinados a la RMI crecen un 56% respecto a 2012, hasta alcanzar más de 82 millones de euros, de la que se espera se beneficien unas 19.000 familias en 2013.

La RMI es una prestación económica periódica que se concede a aquellas personas que, tras agotar los recursos existentes (como el paro o el subsidio de desempleo), se encuentran en una situación de especial dificultad.

“Se trata de un apoyo temporal para ayudar a las familias madrileñas más desfavorecidas. Para que la RMI no se convierta en una prestación pasiva, los beneficiarios tienen que integrarse en proyectos de formación e inserción sociolaboral”, explicó Victoria.