Tras los juguetes, que obtuvieron en noviembre 26 notificaciones, se situaron los vehículos y accesorios, con siete alertas, los productos eléctricos (cinco), los artículos de cocina y deporte (tres) y las luminarias, con dos alertas.

El mes pasado se alertó también una prenda de ropa o calzado de adultos, un artículo infantil, otro más relativo a mobiliario y un último enmarcado en la categoría de otros.

Del total de los 47 productos alertados en noviembre, 38 se retiraron del mercado y se prohibió su comercialización. En otros ocho casos fue el propio fabricante quien, como obliga la normativa, comunicó a las autoridades de consumo la existencia de posibles riesgos en sus productos y adoptó las medidas necesarias para paliarlos. En un caso más, el producto se detectó en frontera y se rechazó su importación.