Con éstos, son ya 10 los linces que se han trasladado a Portugal en el marco del protocolo de cesión suscrito con el ejecutivo luso, que contempla que lleguen al país vecino un total de 16 felinos antes de final de año.

Los tres animales son dos machos (Fresco y Fado) y una hembra (Fresa) nacidos este mismo año, y cuya cesión permite descongestionar el centro onubense, masificado por las elevadas tasas de éxito reproductivo obtenido en cautividad. Igualmente, la entrega permitirá la puesta en marcha en Portugal de un programa de conservación 'ex situ' similar al andaluz, por lo que para la selección de todos los ejemplares se han seguido criterios científicos de adecuación genética.

En este marco de cooperación ambiental entre países, la Administración andaluza no se limita a ceder los ejemplares, sino que pone a disposición de Portugal su asesoramiento para la puesta en marcha de las labores de cría en cautividad, así como para seleccionar las áreas más propicias con vistas a futuras reintroducciones.

Este último aspecto, la devolución del felino a sus antiguos territorios de asentamiento, ha sido señalado como el principal objetivo de conservación del lince, iniciativa que se emprenderá a muy corto plazo en Andalucía, donde ya se han seleccionado y adaptado las zonas de Guadalmellato (Córdoba) y Guarrizas (Jaén), en las que está previsto que este mismo otoño se liberen los primeros ejemplares.