Este descenso se debió a los importantes saneamientos realizados por la entidad y que alcanzaron los 11.485 millones de euros.

Así, durante los nueve primeros meses del ejercicio se han dotado 4.015 millones en provisiones por deterioro de activos financieros y otros, con lo que se acumulan los citados 11.485 en el año.

Con ello, Bankia cubre más del 75% de las provisiones requeridas por los reales decretos del Gobierno.

Como consecuencia de este elevado nivel de dotaciones, Bankia registró un resultado negativo antes de impuestos de 10.083 millones de euros. Descontado el efecto fiscal y el resultado de intereses minoritarios, el resultado atribuido al grupo arroja unas pérdidas de 7.053 millones.

Por su parte, la tasa de morosidad ha crecido de manera importante y se sitúa al cierre de los nueve primeros meses en el 13,3%, mientras que la tasa de cobertura sube hasta el 71,4%.

En cuanto al pasivo, a 30 de septiembre de 2012, los depósitos de clientes totalizaban 98.793 millones de euros, con un descenso de 14.257 millones sobre diciembre. Así, la cuota de mercado de Bankia sobre depósitos del sector privado residente ha variado del 10,4% de diciembre al 9,4% de agosto.