Los controladores afirman que existe “un clima contrario a la seguridad aérea”
- Denuncian que “el pasado 26 de julio estuvimos muy cerca de tener una tragedia” con los aterrizajes de Ryanair en Valencia
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El secretario de Comunicación de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), David Guillamón, denunció este jueves que actualmente existe “un clima contrario a la seguridad aérea".
En una rueda de prensa junto a la portavoz del sindicato, Susana Romero, y su antecesor, César Cabo, Guillamón presentó el diagnóstico de USCA sobre la situación de la profesión en España.
Según Guillamón, Aena es “una organización profundamente enferma que arrastra secuelas muy graves por el conflicto propiciado por el ministerio de José Blanco” mientras la Agencia Española de Seguridad Aérea (Aesa) no ejerce su papel supervisor.
En cuanto a lo ocurrido en 2010, Guillamón advirtió de que a los controladores “les han quedado secuelas gravísimas”, por lo que “son muy susceptibles de cometer errores”. Por ello, pidió a Aena que les realice un estudio psicosocial.
Sobre la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (Aesa), denunció que “es un instrumento de coacción para los trabajadores” y que, además, ignora las notificaciones de las incidencias presentadas por los controladores.
Como ejemplo, aseguró que los controladores habían presentado numerosas notificaciones de vuelos de Ryanair que viajaban “cortos de combustible” y que la Aesa no tomó ninguna acción hasta que “el pasado 26 de julio estuvimos muy cerca de tener una tragedia”.
Ese día, varios vuelos no pudieron aterrizar en Barajas por una tormenta y tres de esos vuelos, de Ryanair, tuvieron que aterrizar de urgencia en valencia por falta de combustible. Las autoridades irlandesas concluyeron que Ryanair cumplió la normativa aunque le recomendaron cambios en su política de combustible.
“De la misma manera que se incita a los pilotos de Ryanair a que lleven poco combustible, se puede incentivar a los controladores para que manejemos más aviones de los que somos capaces”, sentenció Guillamón.
Como resultado de esta situación en Aena y Aesa, los controladores que, según Guillamón “tienen una formación y selección inicial formidable” sufren una “deficiente formación continua”.
También denunció carencias formativas tanto en los controladores que van a entrar en las 13 torres liberalizadas, como los que atienden el Servicio de Dirección de Plataforma (guiado de aviones en tierra) en Barajas y el de control aéreo en aeródromo (AFIS).
Por su parte, Cabo pidió “aprovechar el tema Ryanair” para mejorar la seguridad, aprovechando, además, que el tráfico está bajando, porque “el fondo de la cuestión son los pasajeros”.
“Los controladores somos parte de la solución”, prosiguió Cabo, quien destacó el cambio de actitud en el Ministerio de Fomento tras la llegada de Ana Pastor.
Por último, Romero reiteró la denuncia de “coacciones” por parte de Aesa y puso como ejemplo lo ocurrido en la torre de Santiago de Compostela en noviembre de 2010, cuando varios controladores fueron despedidos por no haberse presentado a trabajar alegando que habían superado las horas anuales.
Romero, que en ese momento trabajaba en Santiago, destacó que varias sentencias judiciales han obligado a Aena a retirar las sanciones a esos controladores. Lo ocurrido allí fue el precedente del cierre del espacio aéreo del puente de la Constitución.
(SERVIMEDIA)
25 Oct 2012
JBM/gja