Esta recomendación figuraba en un documento enviado el pasado verano por el director general de este organismo de la ONU, Jacques Diouf, a los ministros de Asuntos Exteriores, Cooperación al Desarrollo y Agricultura de los países miembros de la FAO y de Naciones Unidas.

Al final, los cerca de 60 jefes de Estado y de Gobierno presentes en Roma dieron su beneplácito a una declaración que recoge el compromiso de reducir el hambre a la mitad en 2020, respecto al nivel de 1990, según informaron a Servimedia fuentes de la FAO.

No obstante, el director de la FAO, Jacques Diouf, alertó el pasado mes de enero en Madrid que este Objetivo de Desarrollo del Milenio de reducir a la mitad el hambre en el mundo en 2015 no se podrá alcanzar hasta 2150 si no se pone freno a la actual crisis alimentaria.

Sin embago, la FAO sí consiguió que la declaración recoja recomendaciones como una nueva estructura de gobernanza de la seguridad alimentaria mundial, incrementar la producción agrícola en los países en desarrollo y fomentar la ayuda alimentaria de emergencia y la reacción temprana a las crisis alimentarias.

Además, Roma recogió el guante de la Conferencia de Alto Nivel sobre la Seguridad Alimentaria Mundial celebrada el pasado mes de enero en Madrid sobre la creación de una Alianza Mundial para la Agricultura, la Seguridad Alimentaria y la Nutrición, que tiene ya objetivos concretos.