La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, fue la encargada de comparecer en rueda de prensa tras la reunión de la Comisión Permanente de la Ejecutiva, dedicada exclusivamente a analizar esos resultados y remitiendo a una comparecencia del secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, el próximo lunes tras el pleno de la Ejecutiva.

Este lunes compareció ella porque Rubalcaba se puso a preparar el debate de Presupuestos nada más terminar la reunión de la Permanente. No fue pleno de la Ejecutiva, explicó, porque no podían asistir ninguno de los candidatos, ni el gallego Pachi Vázquez ni el vasco Patxi López, y no parecía razonable reunir a la dirección completa sin ellos.

Valenciano reconoció el retroceso “importante” de apoyo y aseguró que la dirección federal “acompañará” el proceso de reflexión interna anunciado por los socialistas vascos y gallegos y “compartirá” sus conclusiones.

Además de factores específicos de cada comunidad, considera que hay otros “generales” que se manifestaron en anteriores comicios y ahora de nuevo, y el PSOE tiene que reflexionar sobre ello “con serenidad pero sin excusas, sin excusas pero con serenidad”, y abordar “todos los cambios que sean necesarios para superar esta situación”.

Precisó después que esos cambios serán políticos y también orgánicos, de funcionamiento, para reforzar la transparencia y la participación, pero no afectarán a la dirección en cuanto a que no se preven dimisiones.

De hecho, aseguró que la dimisión de Rubalcaba no se ha planteado y recordó que fue elegido hace apenas ocho meses y tiene, junto a la dirección federal, “una tarea y un mandato” que pretende llevar a cabo.

Cuando la actual dirección tomó el mando, subrayó, “sabíamos que no íbamos a gobernar tiempos fáciles”, más bien “nos esperaban tiempos muy difíciles”, pero una vez que esos temores se confirman “no nos parece momento de abandonar la responsabilidad, tal vez al contrario, de asumirlas con más fuerza”.

En ese sentido, y respondiendo a quienes se apresuran a pedir dimisiones, abogó por “objetivar” los resultados de elecciones y recordó que el PSOE ha perdido en Galicia y en el País Vasco “muchas veces más” de las que ha ganado, y si cada una de esas veces se hubiera cuestionado a la dirección federal, el partido no hubiera tenido estabilidad “practicamente nunca”.

La dirección del PSOE cree que “a partir de” la última etapa del gobierno de José Luis Rodrígez Zapatero muchos electores “se distanciaron” y comenzó un ciclo electoral negativo “que aún no ha terminado” pero que confía en revertir, consciente de la necesidad de “volver a merecer la confianza” de los ciudadanos.

Eso no significa que la actual dirección no se sienta responsable de su gestión, precisó, de lo bueno y de lo malo, de unos resultados en Andalucía y Asturias que fueron “mejores de los previstos” y ahora otros que son “peores”.

La conclusión es que para el PSOE es preciso ahora “ir más deprisa y más a fondo” en los cambios y actualizaciones que tiene pendientes desde su Congreso Federal “y vamos a hacerlo”porque cree que ese es el mensaje que le han enviado los desencantados.

Por eso, acelerará la celebración de las conferencias pendientes y este mismo lunes Rubalcaba contactará con los responsables de las ponencias previstas, Valeriano Gómez y Ramón Jáuregui, para que esas citas se celebren cuanto antes.

Además, pretenden reunir antes de final de año al Consejo Territorial y al Comité Federal, todo ello para “poner sobre la mesa nuevas ideas sobre España y sobre Europa”, convencidos también de que las soluciones deben llegar en gran parte de un trabajo coordinado con la socialdemocracia europea.

El PSOE acelerará esas conferencias pero Valenciano rechazó implícitamente que vaya a acelerar también la elección de la candidatura a las próximas elecciones generales por entender que ese debate no es urgente y está lejos de lo que los ciudadanos sienten ahora como prioridades.

"MOMENTO MALÍSIMO"

Al llegar a la reunión, el líder de los socialistas españoles en el Parlamento Europeo, Juan Fernando López Aguilar, decía que el PSOE vive su peor momento en los últimos 35 años, y Valenciano admitió después que dice “la verdad”. “No se si es el peor, pero desde luego es malísimo”.

Los socialistas remarcaron la misma noche electoral su temor a que el Gobierno de Mariano Rajoy considere refrendada su política económica, y en la rueda de prensa Valenciano se permitió “no afirmar” que haya sido así porque el propio presidente ha estado “escondido” durante la campaña.

Más allá de la estrategia del PP, el PSOE reconoce que no ha sido capaz de movilizar a su electorado potencial aunque precisa que el análisis tiene que ser diferente en Galicia y en el País Vasco.

En Galicia, el PSOE cree que la irrupción de la formación de Xose Manuel Beiras contribuye a explicar el resultado de los demás partidos de izquierda, y en el País Vasco también ha lugado la vuelta de la izquierda abertzale, que ha rentabilizado electoralmente un espacio “que siempre ha existido”.

Por todo ello, Valenciano reconoció que la “renovación ideológica” del PSOE tendrá que abordar como uno de los asuntos prioritarios el modelo territorial y la apuesta por un modelo federal.

Los socialistas afrontan ahora las elecciones autonómicas catalanas con la intención de reforzar el mensaje del PSC como única fuerza que puede hacer de “puente entre dos posiciones antagónicas”, la recentralizadora del PP y la “claramente separatista en este momento” encarnada en las fuerzas nacionalistas.