Pakzad declaró que los proyectos impulsados por los Equipos de Reconstrucción Provincial (PRT), formados por militares y civiles bajo la dirección de la OTAN, "no son muy eficaces", durante un encuentro con varios periodistas en la Embajada de Estados Unidos en Madrid.

Sus críticas se centran en que son proyectos a "corto plazo" que en su mayoría "se diseñan fuera del país", lamentó. Además, consideró que "no hay ninguna justificación" para que no sean las ONG locales, como es el caso de la que ella dirige, las que "ejecuten" los programas sobre el terreno y así puedan continuarlos una vez que los extranjeros "se vayan, que se irán".

Esta mujer, que fundó en 1998 esta ONG y abrió en 2005 el primer refugio para mujeres en Herat para unas 40 mujeres, reclamó a los que diseñan la cooperación internacional que sean lo "suficiente listos" para invertir en la capacidad de los afganos.

Pakzad lamentó el "abandono" que sufren todavía, a su juicio, las mujeres afganas por parte de la ayuda internacional ya que "la guerra y la inseguridad se comen mucho de ese dinero" que se destina a Afganistán. "La seguridad está empeorando" y "la violencia contra las mujeres se ha extendido por todo el país", agregó.

Por último, esta mujer afgana que sufre constantes agresiones y que tiene que ir, como su familia, con escolta de manera permanente, consideró que entre los principales problemas que afectan a las mujeres en Afganistán está la falta de educación, la pobreza, la falta de acceso a la Justicia y los matrimonios forzados.

Para corregirlos, abogó por impulsar un "cambio de mentalidad en los hombres" y "sensibilizar en los derechos de las mujeres" en todas las instituciones y esferas sociales.