En un comunicado, la organización sindical subraya que, aunque “respeta la convocatoria”, entiende que el referéndum supone un paso contrario a su condición de “sindicato profesional e independiente”.

“CSI-F no se mueve por intereses políticos”, asevera la organización, y añade que “deja las opciones políticas en el haber personal de todos y cada uno de sus afiliados”.

No obstante, asegura que esta decisión de desmarcarse de la Cumbre Social es “puntual” y “no rompe el consenso, ni el espíritu unitario en la lucha contra los recortes por parte de las diferentes organizaciones”.

Eso sí, recuerda que “desde el primer momento” se ha manifestado “en contra de las políticas de ajuste llevadas a cabo por el Gobierno central y las administraciones autonómicas y ha estado en todas y cada una de las movilizaciones”.