Fuentes de La Moncloa explicaron que todos los presidentes autonómicos que han intervenido hasta el momento "coinciden" en la obligación de cumplir el objetivo de déficit en 2012, pero tienen algunas "discrepancias" sobre el modo de alcanzar esa meta.

Ante las exigencias de varias comunidades para mejorar el sistema de financiación de las comunidades autónomas, el Gobierno admitió que esa posición puede dificultar que se apruebe por unanimidad la declaración final que había preparado el equipo de Rajoy.

El Ejecutivo considera que la Conferencia de Presidentes "no es el foro" para abrir un debate sobre la reforma del sistema de financiación, ya que entiende que esa discusión debe abordarse en el Consejo de Política Fiscal y Financiera.

En este sentido, las fuentes consultadas no descartaron que el Gobierno pueda dar su brazo a torcer y aceptar un adelanto en el calendario para renegociar el sistema de financiación, si de esa manera se contenta a las comunidades y se consigue lanzar este martes un mensaje de unidad a la UE, aunque recalcaron que ese debate no tocaba "hasta el año que viene".

Frente a las diferencias y matices entre comunidades, el Gobierno prefiere quedarse con la idea común que todos los presidentes autonómicos han puesto sobre la mesa de que el actual problema de financiación procede de la caída de ingresos de 70.000 millones de euros que ha dejado la crisis económica.

El Ejecutivo destaca, además, que durante la reunión no se están produciendo "grandes reproches" entre las comunidades y el Gobierno, tampoco fuertes críticas a los Presupuestos Generales del Estado para 2013.