Según una nota emitida por la Cámara Baja, los salarios de los parlamentarios se congelan por quinto año, además de sufrir el recorte que afectó a toda la función pública en 2010.

En el capítulo de gastos de personal no se incorporan las partidas relativas a planes de pensiones o contratos de seguros colectivos, que ya quedaron en suspenso en el presupuesto de 2012 y que se mantienen.

En el apartado de gastos corrientes y servicios se prevé “un esfuerzo adicional”, con un descenso del 4,86% y una reducción significativa de la partida destinadas a atenciones protocolarias y representativas del 39,79%, así como de las indemnizaciones para ex diputados, que se rebaja un 16,61%. Además, el servicio de telefonía fija y móvil se reduce un 28,57%.

Lo que no experimenta apenas cambios es la partida de subvención a los grupos parlamentarios, que se incrementa sólo un 0,9%.

En el capítulo de inversiones reales se prevé una reducción del 26,92%, por la rebaja del 45% de la reposición de la red wi-fi y por la finalización de proyectos previamente planificados.

La Mesa ha tenido conocimiento de que sólo tres exparlamentarios continuarán percibiendo la indemnización por cese, que preveía el acuerdo de 24 julio por el que se adaptó la normativa anterior.

El pasado mes de junio, eran 41 los perceptores de la citada indemnización. De ellos, seis optaron por continuar recibiéndola y tres de ellos ya han cobrado las mensualidades que les correspondan.

Otros 20 renunciaron expresamente y 15 no han contestado en el plazo dado para expresar su voluntad de seguir acogiéndose o no a ella y que concluyó el 4 de septiembre. En este caso, el silencio implica la renuncia.