Según informó IU, Barrena dijo que la federación que lidera Cayo Lara apoya estas reivindicaciones de los trabajadores de Renfe, Adif y Feve. “El paso de Renfe a manos privadas hará inviable la mejora y consolidación de las líneas de cercanías existentes, abocará a las de media distancia regionales a la desaparición y tendrá graves repercusiones en el empleo, ya que derivará en un número importante de despidos”, destacó Barrena.

Esta es la segunda huelga de 24 horas convocada por los sindicatos tras la aplicación del Real Decreto-Ley 22/2012, que prevé la liberalización del tráfico nacional de viajeros para julio de 2013.

El dirigente federal denunció la “indisimulada intención del Gobierno del PP de privatizar servicios públicos, ocultada con el proceso de integración de Feve y Renfe”.

“Resulta evidente que si sólo se aplican criterios economicistas a los servicios públicos el resultado siempre será el cierre puesto que, al someterlos al mercado, se olvida la componente social que tiene la prestación pública”, dijo.

Barrena anunció que Izquierda Unida seguirá sumándose a las movilizaciones convocadas por los representantes de los trabajadores del ferrocarril en defensa del empleo, “así como para preservar su carácter público y las condiciones de calidad y seguridad de este medio de transporte en todo el Estado”.