En la rueda de prensa ofrecida tras la reunión con su homólogo argelino, Mourad Medelci, el ministro español resaltó que lo “absolutamente necesario” es que los ciudadanos españoles “leean las recomendaciones” que el Ministerio de Exteriores tiene expuestas en su página web y que “extremen los riesgos”. “Cualquier incidente a un español”, es “un incidente que el Gobierno español toma como propio”, manifestó Margallo.

Ambos ministros mostraron su “reprobación” a la oleada de ataques que están sufriendo las embajadas estadounidenses en algunos países árabes –Libia, Yemen y Egipto-. “Espero que al final la razón encuentre su camino y triunfe”, reseño Medelci. Por su parte, Margallo señaló que tanto el Gobierno como el Rey transmitieron ayer sus condolencias por la muerte del embajador y funcionarios estadounidense en Bengasi.

Ante un posible doble juego en Egipto por parte de los Hermanos Musulmanes, al llamar a la calma por lo ocurrido y al mismo tiempo convocar una manifestación de protesta por la difusión del video, el ministro español señaló que tras su regreso de Egipto ha podido constatar su “firme voluntad” de garantizar la libertad religiosa.

Está previsto que el proceso emprendido por el Gobierno argelino se acelere en los próximos meses con la redacción de la nueva Constitución y unas elecciones presidenciales en 2014.

Sobre la recomendación de regresar a España que el titular de Exteriores lanzó a los cooperantes en campos saharauis ubicados en Argelia, Margallo confirmó que “no se ha alterado la posición”. Matizó que “no se ha alterado” la voluntad del Gobierno de atender “las necesidades humanitarias” del pueblo saharaui pero que la condición para revisar esa orden es que se garantice que los cooperantes “no corren riesgo”.

Medelci se reunirá esta tarde con el Rey y mañana con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. A pesar de la crisis la relación económica entre estos dos países con intereses comunes es estrecha y ambos Gobiernos pretenden que se mantenga así. Hay varias empresas españolas trabajando en suelo argelino y se prevé que pueden incorporarse más con el proyecto de construcción de once millones de viviendas. Si 2011 fue, en palabras del ministro argelino, una año “excelente” esperan que con el programa acordado hasta 2014 las cosas se mantengan, por lo menos, igual.