El pequeño ha pasado una temporada este verano en Pamplona, dentro del programa 'Vacaciones en Paz', gestionado en esta comunidad por

la Asociación Navarra de Amigos del Sahara.

Gracias a esta iniciativa, niños saharauis pasan parte de sus vacaciones de verano con familias españolas y pequeños con discapacidad viven en un piso de acogida, tutelados por monitores especializados.

Salek es uno de estos pequeños. Aterrizó en Zaragoza procedente del campamento de refugiados de Tindouf (Wilaya de Aaiun) y recibió la atención necesaria en Pamplona, donde se le diagnosticó el problema visual gracias al interés de la Asociación Navarra de Amigos del Sahara.

"Cuando finalizamos el examen, con la dificultad añadida del idioma, constatamos que (el pequeño) tenía 21 dioptrías en cada ojo", afirmó este viernes el técnico de la óptica de Julio Ezpeleta, una de las que colabora en Navarra con 'Vacaciones en Paz'.

El experto explicó que los cristales que precisaba Salek son de fabricación específica por su especial graduación, con lo que no se encuentran en stock. Sin embargo, la Fundación Cione Ruta de la Luz inició gestiones para conseguirlos y no tardaron en llegar.

Gracias a todo esto, ahora el pequeño puede ver mucho más y mejor que lo hacía antes de usar estas gafas y disfrutar de ellas en su país.