El secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, declaró a Servimedia que el aumento a 450 euros para los desempleados con cargas familiares se usa para “disfrazar” el recorte para los jóvenes.

Ferrer mostró su oposición a que el plan supone proteger a las personas más desfavorecidas como asegura el Gobierno, ya que se trata de una ayuda temporal y puntual.

En este sentido, abogó porque esta prestación sea estable y permanente y se eleve a los 532,50 que es la cuantía del Iprem, el indicador que determina el acceso a otro tipo de ayudas.