A través de diversos proyectos, a los que se apuntan uno de cada cinco inmigrantes de la región, como talleres de creación de empresas o la orientación individual para desarrollar y poner en marcha negocios, llevados a cabo en los 17 Centros de Participación e Integración de Inmigrantes (CEPI) de la Consejería de Asuntos Sociales y del programa Plan de Emprendedores de la Consejería de Educación y Empleo, la Comunidad de Madrid busca, según Victoria, fomentar el espíritu emprendedor tanto de los autóctonos como de las personas de origen extranjero.

Madrid es una región, aseguró, que "hace de la libertad su bandera” y que busca eliminar las trabas burocráticas para que poner un negocio o actividad sea mucho más fácil y no impidan que “ese ímpetu” de personas como las reconocidas hoy quede oculto “en una ventanilla de la Administración”.

Victoria destacó que este acto, amadrinado por la presidenta de la Asociación de Mujeres Marroquíes Al-Amal, Nadia Otmani, se celebró porque, “a pesar de las dificultades”, estas personas de origen extranjero han puesto en marcha múltiples negocios o han mantenido los de personas que hace ya unos años llegaron a la Comunidad. “No hay nadie más emprendedor que un inmigrante”, añadió.

Son ocho los inmigrantes a los que el Centro Hispano-Marroquí ha querido reconocer. Procedentes de distintos países, han sido usuarios del CEPI o han participado en alguna iniciativa del mismo: Gizhlan Loalidi, con su servicio de catering; Horneara Haque, con un comercio; Mohamed Madani Dhimi, dedicado a pintar; Najat El Mzouri Chekroune, de la compañía de danza ‘La Perla de Atlas’; Johny Acevedo y Bibiana Martínez, del sector de la hostelería; Abdul Belhadj, con un comercio; Hicham Malayo y Ruth Miras, con la compañía de teatro ‘La Luna de Oriente’, y José Vásquez y Andrea Silvia Ríos, del sector empresarial.

El consejero explicó que mientras el año pasado el número de autónomos “desgraciadamente” descendía un 7,5% en la región, el correspondiente a inmigrantes aumentó un 5%.

Victoria manifestó que lo que quiere el Gobierno regional es que la Comunidad sea un lugar con “las puertas abiertas a todo el mundo”, especialmente a aquellas personas que llegan con el objetivo de trabajar y desarrollar proyectos empresariales.

Recordó que el pasado domingo se puso en marcha la ley de libertad de horarios comerciales, para que cada uno pueda decidir sobre su negocio. Se trata de medidas que, indicó, buscan crear una Comunidad “libre, sin barreras y, sobre todo, que apueste por la integración”.