No obstante, defendió que los exámenes de fin de etapa previstos en la nueva Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa que prepara el Gobierno ayudarán a corregir los “desequilibrios territoriales”, que a juicio de Wert van en aumento.

Así lo aseguró el ministro durante un desayuno informativo de Europa Press, donde destacó que las diferencias entre Comunidades autónomas, “en cuanto a inversión de recursos y a resultados”, cada vez son mayores.

“Conocer los ríos de España no está reñido” con el estudio de los de cada comunidad, dijo el ministro para ejemplificar que se puede alcanzar “un grado razonable de autonomía” y “un grado razonable de centralización”.

Los ejecutivos regionales se encargan de la gestión y el estado de garantizar unos mínimos comunes mediante la legislación básica, y esto es “lo que proponemos con este sistema”, subrayó.

En su intervención, Wert afirmó que trabajará para conseguir el máximo consenso en torno a la ley, y de hecho, “desde que presentamos el primer informe mantenemos encuentros con todos los actores de la comunidad educativa” de cara a este fin.

El acuerdo de las fuerzas políticas es igualmente importante, prosiguió Wert, quien declaró que “no ahorrará ningún esfuerzo” a fin de alcanzarlo.

Por último, el titular de Educación destacó la necesidad de establecer una auténtica carrera profesional para los docentes y mejorar el sistema de selección, que “en casos extremos funciona de forma adversa” y puede primar al que no consigue plaza.

“No quiero decir que falte vocación y formación entre los profesores españoles”, pero sí que hay que establecer una carrera con posibilidades efectivas de mejora profesional, puntualizó Wert.

Así se recogerá en el futuro Estatuto del Docente, que de acuerdo con el ministro sentará, junto a la próxima ley Orgánica, las bases para la mejora del sistema educativo.