De hecho, su secretario general, Sebastián Reyna, prevé “un generalizado cierre de pequeños negocios comerciales y de hostelería después del verano, amenazados también por los anuncios de aumento en los impuestos a la electricidad”.

En un comunicado, UPTA denuncia que comerciantes y profesionales tendrán que asumir con cargo a sus rentas la elevación de los precios de los servicios para mantener sus cuotas de mercado.

Además, añade que el incremento de dos puntos en el IVA reducido afectará negativamente a la hostelería, al turismo y al transporte de viajeros.

Todo ello hace pensar, según UPTA, que se reducirán las perspectivas de la campaña de verano y puede esperarse una “catastrófica” campaña de Navidad, amenazada además por la eliminación de la paga extra de los funcionarios.

Sin embargo, UPTA valora que se mantenga el tipo superreducido de IVA del 4% para determinados sectores y productos.