Asimismo, el máximo responsable de la SGAE indicó que en 2010 la entidad de gestión perdió 13,5 millones de euros, frente a los 6,3 millones comunicados en su momento por la anterior junta directiva. A pesar de estos resultados y los del año pasado, que serán sometidos en asamblea este jueves a la aprobación de los socios, Reixa dijo que en este momento la situación de la SGAE es "difícil, pero viable", y puso empeño en recalcar que estos datos negativos son fruto de la gestión anterior.

Explicó también que la "severa" auditoría realizada recientemente en la entidad ha destacado que, en lo relativo a la gestión de la propiedad intelectual, la SGAE funciona "razonablemente", pero no así en lo que respecta a la gestión financiera, donde se han detectado muchas carencias, sobre todo en el control de gastos e inversiones.

En cualquier caso, el reparto a los autores, editores y representados alcanzó en 2011 la cifra de 340,1 millones de euros (un 0,7% más que en 2010).

De igual modo, la SGAE rescató del pendiente de identificación un total de 39,2 millones de euros, un 39% más que en 2010. En 2012 está previsto que la cantidad recuperada y repartida aumente respecto a años anteriores (a 30 de abril se han identificado otros 35 millones de euros, siendo los cálculos para finales de año de 60 millones).

Respecto a los ingresos sociales de la entidad, fueron de 320,1 millones de euros, un 6,2% menos que el año anterior, fruto de la continuidad de una crisis que se prolonga durante varios años y cuyos efectos comparte la SGAE con todo el entorno empresarial. De hecho, la morosidad de los usuarios del repertorio ha crecido un 26% en relación a 2010, una circunstancia que, según el presidente de la SGAE, ha sido decisiva en las pérdidas del año pasado.

Según explicó Reixa, la previsión para 2012 es lograr el equilibrio presupuestario de la cuenta de pérdidas y ganancias, manteniendo el porcentaje del descuento de administración y la reducción de las prescripciones, merced a un riguroso control de los gastos de gestión y la moderación en las inversiones.

Un total de 3.367 nuevos socios se han incorporado a la SGAE durante 2011, 3.129 en España y 238 en el extranjero. En la actualidad, 103.466 socios forman parte de la entidad.

Entre los objetivos de la nueva junta directiva, su presidente resaltó la potenciación de la transparencia y el autocontrol, la participación real del colectivo social, la recuperación de los principios originarios de la Fundación Autor y la mejora de la buena imagen y el prestigio de la entidad, así como el desarrollo de un plan de austeridad que reduzca los gastos corrientes y la desinversión en la Red Arteria.

GESTIÓN DESPÓTICA

Tras recordar que la SGAE ha impugnado la pensión mensual de 23.000 euros que el anterior presidente, Eduardo Bautista, acordó con la entidad, Reixa aseguró que esta decisión no se basa en la presunción de inocencia o culpabilidad del anterior jefe de la SGAE. "Incluso no descartamos que se le declare inocente en la 'Operación Saga'", añadió.

Sin embargo, insistió en que la gestión de Bautista fue "despótica y megalómana" y en que ha habido una trama de corrupción y es necesario corregir esa situación.

La impugnación, dijo, se basa en una "provocación" de Bautista, que acudió a Magistratura para presentar una reclamación por despido que fue desestimada, al no haber relación laboral con la SGAE. "Por la boca muere el pez", sentenció Reixa.