De esta manera, las cuentas públicas de 2012 proseguirán con su tramitación parlamentaria. Mañana martes se llevará a cabo el debate de las enmiendas parciales al articulado.

Al texto ya se han incorporado 85 enmiendas del PP durante el paso de los PGE por comisión, aunque puede que se incluyan algunas otras pactadas con grupos de la oposición. Quedan vivas, para su debate y votación, unas 2.480 enmiendas.

“FRENAR LA RECESIÓN”

El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, fue el miembro del Gobierno encargado de defender los Presupuestos de 2012, y destacó que son “austeros”, a la par que “comprometidos con la sostenibilidad del Estado del bienestar”.

Los PGE de 2012 “apuestan por la austeridad, pero sin ahondar en la recesión”, apuntó Montoro, quien agregó que buscan “frenar esta recesión económica y abrir las puertas al crecimiento y la creación de empleo”.

Además, aseguró que “vamos a cumplir con Europa y con los ciudadanos españoles, eso es lo que significa en suma cumplir con los objetivos de déficit público que están marcados para España”.

“Sabemos que no es un camino fácil, ni accesible sin dificultades, pero nos va a permitir llegar cuanto antes al objetivo de crecer y crear empleo”, sentenció.

CRÍTICAS OPOSICIÓN

La propuesta de Presupuestos del Gobierno recibió ocho vetos: PSOE, CiU, PNV, PSC dos de la Entesa pel Progrés de Catalunya, y tres de integrantes del Grupo Mixto.

Desde las filas del PSOE, su portavoz de Presupuestos en el Senado, Felipe López, defendió el veto señalado por su grupo a unos Presupuestos que, afirmó, no van a ayudar a la recuperación de la economía y el empleo.

López subrayó que “no pedimos milagros” porque “sabemos de la limitación” del gasto, aunque reclamó una política “coherente” con las medidas de crecimiento que el Gobierno reclama en Europa.

Por su parte, el senador de CiU Ferran Bel justificó el veto de su formación porque los PGE “no son los que necesita el Estado español en este momento” y “no son los que generan la confianza que requiere” el país.

Además, el senador de CiU apuntó que “las partidas de gasto no son realistas” y las de ingresos “están infladas”.

Mientras, el senador del PNV Joseba Zubía consideró un “enorme error” del Gobierno “no buscar un amplio consenso” para sacar adelante las cuentas públicas, ya que “la tarea es ingente”.

Además, alertó de que se está poniendo a España “al borde del rescate, y no sólo de la banca”. “Los Presupuestos no van de modo alguno a permitir que la economía mejore al corto plazo, más bien lo contrario porque ahoga cualquier posibilidad de crecimiento”, añadió.

Desde la Entesa pel Progrés de Catalunya, el senador José Montilla (PSC) manifestó que “estos Presupuestos son un cierto espejismo de austeridad y un pésimo instrumento para hacer frente a la crisis española”.

“Estos Presupuestos no generan confianza a la ciudadanía ni a nuestros socios comunitarios, ni a los mercados financieros”, aseguró Montilla, para agregar que también “son injustos e insolidarios”.

Del mismo grupo parlamentario, Jordi Guillot (ICV) expuso los motivos del veto de su formación, entre los que destacó que el objetivo de déficit es inasumible. “Ni podemos, ni nos conviene”, afirmó.

El senador de IU José Manuel Mariscal, integrante del Grupo Mixto, mostró su oposición a los PGE de 2012 porque “son un ataque programado a los derechos sociales y cívicos conquistados durante años”, y denunció que se los están “intentando cargar de un plumazo”.

También dentro del Grupo Mixto, el senador de Coalición Canaria Narvay Quintero quiso dejar claro que su veto no es un “qué hay de lo mío”, pero advirtió de que “si el Gobierno no cambia” de políticas las Islas Canarias “se van a convertir en un problema para el Estado y todos esperamos que eso no ocurra”.

RESPUESTA DEL PP

El portavoz de Presupuestos del PP en el Senado, Francisco Utrera, respondió a los ocho vetos presentados por los grupos de la oposición, y defendió que los Presupuestos Generales del Estado que ha diseñado el Ejecutivo para 2012 son los adecuados en las actuales circunstancias.

“De las despensas llenas hemos pasada a ser farolillo rojo”, dijo Utrera, quien afirmó que hay que actuar para que evitar que la situación no se haga inmanejable. Así, consideró que hay algunos grupos que no son conscientes de la difícil situación económica actual.