Una plataforma critica que Gallardón defienda la custodia compartida y no diga nada sobre equiparar permisos de paternidad

- Promueve una proposición de ley que pide equiparar los permisos de ambos progenitores

MADRID
SERVIMEDIA

La Plataforma por Permisos Iguales e Intransferibles de Nacimiento y Adopción (Ppiina) declaró este lunes que imponer la custodia compartida de los hijos en casos de divorcio cuando hay desacuerdo es “una aberración y solo será un parche”, salvo que se fomente “una coparentalidad responsable desde el mismo momento en que nace el hijo”.

María Pazos, miembro de la plataforma, explicó en el acto de presentación de una proposición de ley para equiparar los permisos de paternidad y maternidad que aunque “los roles de género están más diluidos en las generaciones jóvenes, éstos aparecen de nuevo en el momento del nacimiento del primer hijo”.

En este sentido, aseguró que entonces las mujeres se quedan en casa para cuidar de los niños y además suelen pedir después jornadas reducidas o excedencias en el trabajo, de modo que son ellas quienes establecen mayor vínculo con los hijos y asumen el rol de cuidadoras.

“El problema es que a los divorcios se llega en unas condiciones de gran desigualdad, con una parte de la pareja que se ha dedicado a cuidar de los hijos y otra dedicada a mantener el hogar”, agregó.

Según Carmen Castro, miembro de la misma plataforma, “lo que hay que hacer es prevenir esta división sexual del trabajo” con la equiparación de permisos de nacimiento y crianza, pues “imponer una custodia compartida a alguien que no está familiarizado con el cuidado de los hijos años después es una aberración”.

Esta igualación favorecerá la coparentalidad y la permanencia de la mujer en el mercado de trabajo, señaló Pazos, para quien “lo contrario solo será un parche”. Si se consiguiese una corresponsabilidad de ambos cónyuges la custodia compartida sí sería sencilla y positiva, declaró.

A su juicio, lo que no se entiende es que Alberto Ruiz-Gallardón "defienda imponerla incluso en casos de desacuerdo y sobre una propuesta como la nuestra no se manifieste".

INICIATIVA LEGISLATIVA

Por este motivo, la plataforma ha decidido presentar la proposición de ley de reforma del sistema de permisos y prestaciones para el cuidado y atención de menores por parte de sus progenitores, que esta entidad presentará en el registro del Congreso de los Diputados el próximo 21 de junio.

En su propuesta, la plataforma pide un permiso de 16 semanas “individuales e intransferibles” para los hombres, que se implantaría de forma paulatina a partir de 2013. El objetivo es aumentar dos semanas al año hasta llegar a las 16, explicó Castro, aunque “estamos dispuestos a negociar el calendario y a aplazar su aplicación si es necesario”.

Además, la iniciativa propone cambiar la denominación actual, “permisos de maternidad y de paternidad”, por los términos “permiso parental inicial” y “permiso parental de crianza”.

El primero tendría dos semanas de duración, sería obligatorio para ambos cónyuges y se debería utilizar nada más producirse el parto o la adopción.

El segundo daría derecho hasta 14 semanas (de las que 6 serían obligatorias para ambos) y cada cónyuge podría solicitarlo de forma simultánea a su pareja o no y dividirlo en varios bloques, siempre y cuando se disfrutase antes de que el niño cumpliese los 18 meses de edad.

Finalmente, la medida defiende reemplazar el permiso de lactancia por dos semanas más optativas para ambos progenitores.

Según la plataforma, la norma busca equiparar estos permisos “al resto de derechos laborales, que son intransferibles, individuales y no tienen sesgo de género”.

“Lo que actualmente se produce es una discriminación ejercida por la administración pública”, señaló Pazos, que “penaliza el trabajo de la mujer y que en épocas de crisis favorecerá todavía más su expulsión del mercado de trabajo”.

Esta proposición de ley será defendida por el grupo de La Izquierda Plural y cuenta con el respaldo de Nafarroa Bay, BNGa y Esquerra Republicana de Catalunya.

UPyD no votará en contra aunque podría presentar alguna enmienda Y PSOE y PP no se oponen, aunque dicen que “no es el momento”, señalan desde la propia plataforma.

Con todo, la plataforma espera que este trámite ayude a poner el debate sobre la mesa y obligue a que todos los grupos parlamentarios “se retraten”. Asegura que el impacto económico de estas medidas está calculado (200 millones por año) y se podría retrasar, con lo que “son resistencias del patriarcado” lo que lleva a los grupos a rechazar esta propuesta, concluyó Pazos.

(SERVIMEDIA)
18 Jun 2012
AGQ/gja