Según informó este miércoles Telefónica, esta alianza incluye un acuerdo recíproco de “roaming” (tarifas en itinerancia) nacional, tanto en servicios de voz como de datos, lo que supone una mejora en la capilaridad de la red de ambas compañías.

Al mismo tiempo, ambas compañías han acordado compartir emplazamientos y analizar el despliegue de nuevas infraestructuras de última generación de manera conjunta.

En todo caso, recordaron que tanto Movistar como Iusacell seguirán gestionando de manera independiente su espectro y la provisión de servicios en competencia.

Desde Telefónica destacaron que “la alianza garantiza que el despliegue de capacidad necesario para ofrecer los próximos servicios de Movistar y Iusacell se realice de la forma más rápida y eficiente, con la mayor cobertura geográfica posible”.

En términos financieros, la alianza estratégica permitirá a Movistar generar ingresos adicionales y sinergias en gastos de red e inversión.

La española indicó que este acuerdo “es un ejemplo más del foco de Telefónica en optimizar el uso de los recursos, mejorar la rentabilidad de los negocios e incrementar la flexibilidad financiera”.