La Red Europea de Lucha contra la Pobreza saca "tarjeta roja" a la UE

- Por abandonar a las personas más vulnerables "en la carrera para apaciguar a los mercados"

MADRID
SERVIMEDIA

La Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (Eapn, por sus siglas en inglés) ha celebrado recientemente una asamblea en Noruega, en la que ha decidido sacar "tarjeta roja" a las instituciones de la Unión Europea (UE) por abandonar a las personas, también a las más vulnerables, "en la carrera para apaciguar a los mercados".

"Los Estados miembro, actuando de manera coordinada en el Consejo Europeo, priorizan las medidas de austeridad, lo que hace que las personas pobres paguen los costes de una crisis que no han creado y perjudica la recuperación inclusiva", reza la declaración final salida de la 23ª asamblea general de la Aepn.

Los delegados a esta asamblea solicitaron a los líderes de la UE que situaran a las personas y al planeta por delante de los mercados y que acordaran un Pacto de Inversión Social, "con el fin de restaurar la confianza de las personas y presentar un enfoque positivo y una hoja de ruta para el futuro de la cooperación en la UE", pero, aseguran, no han visto nada de esto.

Al contrario, dicen que se han encontrado con un "brutal abandono" de la UE a la población de Grecia y con un "modelo de austeridad descaradamente erróneo, que está llevando a Europa hacia la recesión y la fractura".

Por todo esto, los delegados a la asamblea general hacen un llamamiento a la UE y a sus Estados miembro para que adopten un Pacto de Inversión Social, que recoja la inversión en creación de empleo de calidad y en servicios accesibles en los sistemas de protección social.

La inversión en educación, los servicios de salud, la vivienda asequible, la energía y el freno del "sinhogarismo" también deben formar parte del pacto, añade la declaración.

Igualmente, el Pacto de Inversión Social debe apoyar, en su opinión, el papel del Estado para proveer bienes comunes y asegurar la inclusión y cohesión social.

Debe, asimismo, conseguir y distribuir los recursos de manera justa, salvar el euro y reforzar la estabilidad económica en Europa sin sacrificar la solidaridad entre las regiones y las clases sociales y medir el progreso social, no el rendimiento económico.

(SERVIMEDIA)
12 Jun 2012
IGA/gja