El expediente de desahucio se ha producido por la ocupación ilegal de la vivienda, ya que el adjudicatario está actualmente en prisión y cedió ilegalmente el domicilio al actual ocupante, con una deuda de 5.871 euros por impago de los recibos del alquiler.

A las 09.00 horas, los agentes del Cuerpo Nacional de Policía comenzaban el lanzamiento, accediendo a una vivienda donde se encontraban dos personas que no han facilitado la entrada. Tras acceder a la misma, los agentes han encontrado una importante cantidad de estupefacientes que los ocupantes trataban de eliminar por los desagües de la vivienda, según informa la Junta.

Ante esta situación, se han personado agentes de la brigada de estupefacientes tras solicitar una orden para proceder al registro exhaustivo de la vivienda, y al mismo tiempo, la policía ha detenido a los dos ocupantes. Después de suspenderse el lanzamiento hasta que ha finalizado el registro, se ha procedido al desalojo de los enseres y muebles de la vivienda.

Este nuevo desalojo ha sido debidamente autorizado por la Autoridad Judicial y supone la finalización del expediente de desahucio. La Administración pretende con estas medidas, buscar la "normalización" de las barriadas que se han visto perjudicadas por las conductas asociales de algunos inquilinos, que no han cumplido con las normas que se establecen en los contratos de arrendamiento de las viviendas de promoción pública, señala la Junta en un comunicado.