En un comunicado, Aena explica que es ajena a este conflicto laboral originado por los desacuerdos entre trabajadores y la empresa concesionaria del servicio de limpieza de la T1 y aboga por una pronta resolución del mismo.

Además, deplora los destrozos que se están produciendo, que no solamente originan un problema sanitario, sino un deterioro de algunas de las instalaciones del aeropuerto, como vestuarios, baños o escaleras mecánicas, por lo que se reserva las acciones judiciales que se pudieran derivar por los desperfectos ocasionados.

Asimismo, asegura haber realizado todas las gestiones oportunas para que las partes alcanzaran un acuerdo.

En la misma línea, destaca que desde la propia dirección del Aeropuerto de Barcelona-El Prat se llevarán a cabo todos los esfuerzos necesarios para que esta situación se encauce de manera satisfactoria para ambas partes.