Rubalcaba reclamó en concreto las comparecencias urgentes en la Comisión de Economía de Congreso del gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez; del presidente dimitido de Bankia, Rodrigo Rato, y de su antecesor al frente de Caja Madrid, Miguel Blesa; del actual presidente de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri; del expresidente de Banacaja José Luis Olivas, y de algún representante cualificado del Gobierno.

Además, el líder socialista considera imprescindible que las comparecencias se produzcan en comisión y a puerta abierta, y no como insinuó hoy el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien se pronunció a favor de la tarea de la subcomisión creada para estudiar lo ocurrido en Bankia y en la que las comparecencias se realizan a puerta cerrada.

“Si no hay comparecencias”, aseguró Rubalcaba en rueda de prensa posterior a la reunión de la Ejecutiva Federal socialista “no seguiremos apoyando el proceso” de inyección de dinero público en Bankia.

Pese a esta contundencia, los socialistas no piensan solicitar de momento la creación de una comisión de investigación sobre la entidad. “Confío mucho en las comparecencias” que deben producirse en el Congreso, dijo Rubalcaba, tras las cuales se podrá evaluar si es necesario solicitar una comisión de investigación o no.

El PSOE afirma que los ciudadanos necesitan saber cómo se pasa de una petición de 4.500 millones de euros a otra de 23.000 millones en dos semanas, y exige las explicaciones que el Gobierno no ha dado y que ha tenido que detallar el nuevo presidente de Bankia.

“La gestión del Gobierno ha sido lamentable”, criticó,

y ahora hay que saber “lo que ha pasado, lo que va a pasar con Bankia, cómo se va a garantizar que no se pierde un solo euro público en el camino y cómo se va a gestionar a partir de ahora” la entidad para “decidir sobre la aportación de dinero público”.

Además, Rubalcaba insistió en es que es “muy malo” cuestionar la tarea de las instituciones públicas, como el Banco de España, contratando a unas agencias extranjeras para que evalúen la situación real de la entidad.

El líder socialista refrendó la opinión de Rajoy de que no será necesario acudir al fondo de rescate europeo y puso en valor la utilidad de su reunión del viernes con el presidente del Gobierno para lograr que España hable “con una sola voz” en Europa.

DECRETO

No quiso, sin embargo, desvelar cual será la posición de los socialistas en la votación del decreto de reforma financiera que el Gobierno someterá al criterio de la Cámara Baja el próximo jueves.

Para Rubalcaba, el caso Bankia y la reforma no se condicionan directamente, aunque reconoció que son asuntos muy vinculados. Los socialistas quieren plantear al Gobierno una negociación abierta sobre algunos aspectos de la reforma y el recorte de fondos en Educación y Sanidad.

Para intentar un consenso, dirigirán al Ejecutivo esta misma tarde,un documento en el que plantean sus reticencias sobre algunos aspectos del decreto, que quieren que se tramite como proyecto de ley para poder introducir reformas.

Además, quieren arrancar al Ejecutivo algunas concesiones en materia de educación y sanidad, aunque Rubalcaba no quiso poner sobre la mesa reclamaciones concretas para “no condicionar” a los negociadores.

El PSOE está preocupado porque la reforma financiera ha generado “incertidumbre” sobre todo el sistema financiero español, no ha solucionado los problemas de restricción crediticia, no garantiza el retorno del dinero público que se use para reflotar entidades y puede acabar generando una concentración excesiva del sector bancario.

En suma, los ciudadanos se preguntas por qué unos recortes “durísimos” en educación o sanidad y tantos fondos para rescatar a los bancos, indicó. Tras asegurar su intención de ayudar al Gobierno a salir de esta situación, Rubalcaba pidió, ante todo, “transparencia”.

Advirtió, además, que para que el PSOE vote el decreto del jueves no bastará un compromiso verbal del Gobierno a favor de buscar un acuerdo, habrá que “dialogar antes”.