Fuentes del PNV informaron a Servimedia de que su diputado Aitor Esteban había contactado con los responsables del Ministerio del Interior y de la Guardia Civil, que le habían prometido que se retirarían los controles.

Esta decisión se produjo después de que los peneuvistas denunciaran este mediodía que la existencia de estos dispositivos policiales en la autovía de Burgos estaban provocando grandes atascos entre los aficionados del Athletic que viajaban a Madrid.

La formación nacionalista pidió al departamento de Jorge Fernández Díaz que se retiraran estos controles. Para el partido que preside Íñigo Urkullu era una “provocación” retener en la carretera a los aficionados que intentan llegar a Madrid.

En todo caso, el PNV pidió “prudencia” y “paciencia” a los seguidores del equipo vasco que tratan de alcanzar la capital para presenciar el encuentro frente al Barcelona.

En este sentido, la Ertzaintza ha calculado que serán entre 40.000 y 50.000 los aficionados del Athletic de Bilbao que se desplazarán a Madrid para seguir la final de la Copa del Rey.