Según informó hoy Repsol a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), estas cifras confirman el “alto potencial” del bloque BM-C-33 situado en la Cuenca de Campos, donde se encuentran los recientes descubrimientos de Seat, Gávea y Pão de Açúcar.

El pozo fue perforado con una lámina de agua de aproximadamente 2.800 metros, tiene una columna de hidrocarburos de 500 metros y está ubicado a 195 kilómetros de la costa del Estado de Río de Janeiro.

Repsol Sinopec Brasil opera estas concesiones con un 35% de participación y cuenta con Statoil (35%) y Petrobras (30%) en el consorcio, que está preparando un plan de evaluación para presentar a la Agencia Nacional de Petróleo, Gas e Biocombustíveis (ANP).

La compañía indicó que el “éxito exploratorio” de Repsol Sinopec Brasil ha supuesto la creación de una importante cartera de proyectos que alimentarán el incremento de la producción de Repsol en los próximos años.

Asimismo, subrayó que el “offshore” de Brasil es una de las áreas con “mayor crecimiento en reservas de hidrocarburos del mundo” y que la actividad exploratoria de la petrolera en los últimos años le ha permitido situar su tasa de reposición de reservas, la proporción de barriles hallados frente a barriles producidos, en 131% en 2010 y 162% en 2011.

Repsol Sinopec Brasil se creó a finales de 2010 para desarrollar conjuntamente proyectos de exploración y producción en el país y está participada en un 60% por Repsol y en un 40% por la compañía china Sinopec y actualmente sus reservas probadas ascienden a 35,6 millones de barriles equivalentes de petróleo (Mbep).