“En la actualidad, las comunidades de propietarios con salas de calderas son consideradas como grandes consumidores, aplicándose por ello la tarifa reservada a uso industrial, pese a que el destinatario final de dicho servicio siempre es el residente de una vivienda, cuya finalidad principal es su habitabilidad”, denuncia el CAFMadrid.

La situación actual se debe a que las comunidades de propietarios con salas de calderas tienen un consumo superior al límite establecido para acogerse al mercado regulado del gas (50.000 Kwh anuales), siendo consideradas por ello grandes consumidores. “En consecuencia, las comunidades solo pueden contratar el suministro de gas en el mercado libre, no pudiendo elegir el regulado, como sí ocurre con los particulares, aun cuando el 80% de los ciudadanos reside en comunidades”, lamenta este colegio profesional.

Además, pone como ejemplo que, en un edificio de 10 viviendas con calefacción y un consumo unitario de 8.000 Kwh anuales se pagaría de media por cada una de las casas 452,96 euros al año si la calefacción es individual y 924 euros si es centralizada. “El coste del gas en el edificio para un propietario es el doble en un caso respecto al otro, lo que parece discriminatorio para un servicio, la calefacción, siendo el usuario final el mismo y el destino del gas también”, sentencia el CAFMadrid.

El CAFMadrid destaca que se une así a la demanda del Consejo General de Colegios de Administradores de Fincas de España (CGCAFE), para quien, en palabras de su presidente, Salvador Díez, “es necesario actuar contra el impacto negativo que provoca la evolución del precio de los combustibles, precisamente en la época del año con mayor demanda en las viviendas por la necesidad de calefacción, tanto cuando el servicio es individual como cuando se encuentra centralizado, por lo que hemos solicitado que puedan aplicarse las medidas fiscales a las facturas de los hogares y a las comunidades de propietarios mediante la reducción de la carga fiscal en las facturas del gas”.