El informe, presentado hoy en Bilbao, fecha en la que se celebra el Día Mundial de la ucha Contra la Droga, revela no sólo el tipo de drogas que se consumen en la comunidad, sino la actitud social que se adoptan ante ellas.

En el estudio se constata que en los últimos años ha descendido claramente el consumo de heroína, mientras que ha aumentado ligerametne el de cocaína. Algunas drogas como "spedd" han protagonizado una fuerte irrupción, mientras que el LSD se encuentra en claro retroceso.

La actitud social de los vascos ante las drogas ha cambiado en los últimos 10 años, y así e tabaco ha pasado de ser una droga de inserción a considerarse de exclusión, y los fumadores empiezan a estar mal vistos.

Las heroína ha pasado de ser un símbolo de modernidad contracultural para convertirse en estandarte de autodestrucción, rechazo y marginación.

A su vez, el alcohol pasa a ser considerado por un alto número de jóvenes vascos como la droga por excelencia que se consume de manera abusiva los fines de semana.

Para el secretario general de Drogodependencias del Gobierno vasco,Jesús Pérez Arróspide, uno de los problemas más urgentes de resolver en Euskadi es el aumento del número de jóvenes que beben en exceso.

En su opinión, "el joven llega al lunes y a los demás días de la semana todavía bajo los efectos del alcohol, justamente en aquellos momentos en que sus obligaciones escolares y de otro tipo requieren un importante esfuerzo y dedicación de todas sus facultades".