Su objetivo es fomentar las buenas prácticas en el ámbito de la igualdad de oportunidades y se concederá a aquellas compañías destacadas por la puesta en marcha de políticas de no discriminación entre mujeres y hombres.

Este logotipo fue aprobado en Consejo de Ministros a propuesta del Ministerio de Igualdad y se trata de una marca de excelencia para las empresas, que lo podrán utilizar en sus relaciones comerciales y con fines publicitarios.

Entre otros criterios, en la concesión del sello se tendrán en cuenta la existencia de planes de conciliación de la vida personal y laboral; la adopción de programas de igualdad; el equilibrio entre mujeres y hombres en los distintos niveles profesionales, y la publicidad no sexista de los productos o servicios de la empresa.

Deberá solicitarse en la Dirección General para la Igualdad en el Empleo del Ministerio de Igualdad y tendrá una vigencia de tres años, aunque las empresas distinguidas con él deberán remitir un informe anual.

Dicha acreditación muestra un monigote en forma de I, y según lo publicado, estaba recogida en el artículo 50 de la Ley para la Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres.