Así se recoge en una proposición no de ley aprobada hoy por la Comisión de Cooperación Internacional, fruto de una iniciativa del Grupo Parlamentario Popular que después se transaccionó con las enmiendas que presentaron PSOE y CiU.

Según el texto, esta práctica supone una violación muy grave de los derechos humanos de la infancia, por lo que el gobierno debería “aplicar una política exterior coherente con esta prioridad, con los compromisos internacionales adquiridos y suscritos por España y con las directrices de la Unión Europea en este terreno”.

También reclamó el impulso de tratados internacionales encaminados a prevenir el reclutamiento de más niños soldado, y la puesta en marcha de programas para la rehabilitación y reintegración de estos menores.

En la propuesta se instó al Gobierno a estudiar “la posibilidad de que el nuevo Plan Director de la Cooperación Española establezca vínculos entre la ayuda al desarrollo y los avances en la erradicación” de esta práctica, en aquellos países donde según la ONU se utilice a los menores de dicho modo.

En la exposición de motivos, el PP adujo que Al menos 15 países siguen reclutando niños y niñas soldado para la guerra, y que estos menores “se ven sometidos a situaciones extremas”. “Son utilizados como instrumentos para cometer atrocidades, sufren malos tratos y violaciones y se convierten en testigos de asesinatos”, prosiguió.

Además, participar en un conflicto armado “supone que estos menores sean considerados como culpables y no como víctimas”, con lo que son capturados y arrestados desoyendo cualquier norma jurídica internacional, concluyó el texto.