Así consta en la octava oleada del estudio ‘Cosmo-Spain’, impulsado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), un trabajo que desde mayo de 2020 evalúa cada dos meses los conocimientos y la percepción del riesgo de la población ante la pandemia, cuyos resultados fueron publicados este jueves.

Entre los datos destacados en esta ronda, llevada a cabo entre el 30 de noviembre y el 13 de diciembre, aparecen un aumento de la confianza en las vacunas, un repunte de la preocupación por la pandemia y un leve descenso de comportamientos preventivos, con la mascarilla como medida más utilizada.

De este modo, el 44% de los encuestados reconoce que le preocupa “mucho/muchísimo” la situación actual frente al 39% de la anterior oleada. Al mismo tiempo, el 60% señala que el virus se propaga “muy rápido” frente al 28% de la última encuesta, mientras que el 22% considera que tiene “muchas probabilidades” de contagiarse, un parámetro que se situó en el 17% hace dos meses.

A su vez, el 93% de los ciudadanos deja claro que se ha puesto o que se pondrían una tercera dosis en el caso de que las autoridades sanitarias recomendaran una dosis adicional. Por otra parte, un 2% de los encuestados tiene claro que no quiere vacunarse.

La novedad de esta oleada es la inclusión de una pregunta a personas con hijos menores de 12 años sobre su intención de vacunarlos. Cabe recordar que la encuesta se realizó antes del inicio de la vacunación en España de este rango de edad. En este caso, el 60% se muestra dispuesto a vacunarlos “mañana mismo”, el 20% asegura que no los vacunaría y otro 20% tiene dudas al respecto.

Por otro lado, el nivel de conocimiento sobre el coronavirus ha mejorado para casi todas las preguntas relacionadas con la pandemia. Prueba de ello es que a la cuestión sobre ‘usar mascarilla en interiores es fundamental para evitar la transmisión’ un 93,7% de las personas ha respondido correctamente.

Respecto al respeto a las medidas preventivas, sigue siendo elevado, pero se observa un ligero descenso en varios compartimientos, siendo el uso de la mascarilla según lo recomendado y de forma correcta en el interior de bares y restaurantes, ventilación, higiene de manos y el no visitar a familiares o amigos en cuarentena las más respetadas.

La confianza en las fuentes de información se mantiene en niveles similares, siendo los profesionales sanitarios y el Ministerio de Sanidad las dos en las que se confía, frente a las redes sociales, que continúan como las que menos confianza inspiran.

Por último, aumentan las personas que piensan que las decisiones tomadas para hacer frente a la pandemia no han sido exageradas, aunque crece el descontento con algunas de ellas, como las restricciones al ocio nocturno y la no obligatoriedad de la mascarilla en exteriores.