En un comunicado, ambos sindicatos señalaron que “de la noche a la mañana, en decenas de carterías de Correos, la empresa, con nocturnidad y alevosía ha cambiado la organización del servicio, retirando el mobiliario y provocando que los carteros clasifiquen los envíos en el suelo”.

Ambas organizaciones sindicales advirtieron que “el nuevo modelo conlleva una disminución de espacios y personas de las Unidades de Reparto destinadas al Servicio Postal Público para dejar paso, como ya se hace en Oficinas y Centros de Tratamiento, a la paquetería comercial y rentable de la filial Correos Express, que pretenden que sea atendida con trabajadores subcontratados y precarizados, como ya se hizo en plena pandemia”.

Por ello, CCOO y UGT denuncian que “la desaparición de las secciones de reparto y los distritos como modelo de distribución es todo un alarde de alejamiento de la función social y pública de Correos, eje de una buena prestación a la sociedad”. Asimismo, apuntaron que este cambio de modelo es “un indicio claro de que caminamos hacia un modelo cada vez más ‘a lo rider’ en la distribución, en el que prima llevar cosas, sea lo que sea, en detrimento del servicio público postal y en el que impere la precariedad, la flexibilidad y la pérdida de derechos laborales”.

En este sentido, los dos sindicatos recordaron que en dos años la plantilla de Correos ha sufrido un recorte de 7.000 trabajadores, por lo que “los carteros ahora cubrirán mayores distancias” y tienen “mucha más carga de trabajo, además de mucha más polivalencia, movilidad funcional y responsabilidad”.

Ambas secciones sindicales consideran también que “este solo es el principio de una agresión que la empresa quiere culminar el próximo 15 de enero con el cambio total del servicio de reparto y distribución de Correos, lo que no puede quedar sin una respuesta movilizadora integral a nivel estatal”.