En una rueda de prensa ofrecida en la sede del PP, Cospedal tuvo que esquivar en más de una decena de ocasiones las pregunta de los periodistas sobre el accidente del Rey, la transparencia de la Corona y las consecuencias que puede tener esta situación para el Gobierno, en el momento en que está pidiendo a toda la sociedad que se apriete del cinturón.

La dirigente popular afirmó que el PP "no va a entrar en la polémica que algunos están tratando de alimentar", pero no identificó a esos agitadores.

"Utilizar un acontecimiento concreto para crear a veces dudas sobre instituciones no es hacer el mejor favor a la democracia española y a nuestra forma de Estado y de Gobierno", insistió la número dos del PP.

No quiso pronunciarse sobre si el Gobierno debe autorizar previamente a su realización los viajes del Rey, aunque sean privados, y tampoco opinó sobre la posible regulación de los regalos que recibe la Familia Real.

"Entiendo que la relación entre la Casa Real y los sucesivos Gobiernos ha sido siempre una relación muy fluida, y así sigue siendo y corresponde al Gobierno fijar cuáles sean en este sentido las pautas de esa relación", ha respondido.

Insistió en que el Ejecutivo nunca ha dado cuenta de las actividades privadas del Rey, aunque se mostró convencida de que el Gobierno estaba informado de que el monarca se encontraba fuera de España.

En su opinión, "no hay ninguna versión contrapuesta" entre lo dicho por el Gobierno y la versión dada por el vicesecretario general de Organización del PP, Carlos Floriano, quien explicó que el partido no tuvo conocimiento del accidente del Rey hasta que la Casa Real lo comunicó públicamente.

Según Cospedal, ni el PP ni cualquier otro partido "tiene por qué tener la información que tiene el Gobierno". En todo caso no se quiso pronunciar sobre si estos hechos ponen al Ejecutivo en un aprieto o sobre si sería bueno de don Juan Carlos pidiera disculpas.